En este entorno tan positivo, nuestras patinadoras participaron con muchísima ilusión. Para algunas fue su primer campeonato, mientras que para otras, la primera experiencia en un nuevo nivel competitivo. Todas ellas demostraron una actitud brillante, defendiendo sus coreografías con esfuerzo, alegría y compañerismo.
Destacamos el resultado del grupo juvenil de Nivel 3, formado por Blanca, Patricia y Rocío Serrano, quienes lograron subir al podio con un merecidísimo tercer puesto.
Pero más allá de las clasificaciones, lo que realmente nos emociona es el gran salto cualitativo que está dando la escuela: patinadoras con niveles técnicos cada vez más altos, coreografías más complejas y ejecuciones más pulidas… Sin duda, esta edición ha sido una de las más especiales hasta la fecha.
Recibimos, además, el reconocimiento de otros entrenadores, quienes nos felicitaron por el crecimiento que está experimentando nuestro equipo. Este tipo de comentarios refuerzan nuestro compromiso con un proyecto que avanza paso a paso, con constancia, trabajo en equipo y mucha pasión.
Esta cita nace con un espíritu inclusivo y formativo y con el objetivo de, por un lado, dar visibilidad y motivación a aquellas deportistas que, por dedicarle menos horas semanales al entrenamiento, no suelen tener la posibilidad de participar en los Trofeos de Federación.
A través de coreografías grupales, compuestas por equipos de 5 o 6 integrantes, se integran elementos obligatorios del patinaje individual, pero ejecutados de forma conjunta. El resultado: una competición más accesible, colaborativa y enriquecedora, donde lo importante es disfrutar y crecer en equipo.
Desde el club, queremos dar las gracias a nuestras patinadoras, a su entrenadora y a todas las familias que hacen posible esta aventura. Este campeonato ha sido solo el comienzo de una etapa muy prometedora.
¡Felicidades a todo el equipo!